La llamada de un trabajador de una orujera de Martos alertaba al 092 de un perro atrapado en el interior de una balsa y cuya vida peligraba gravemente. Inmediatamente, un operativo de Policía Local se desplazaba al lugar para intentar auxiliar al animal. Una vez rescatado de una muerte casi segura, se comprobó que el perro disponía de microchip, pudiendo localizar a sus propietarios, los cuales lo buscaban con angustia. Gracias a la actuación de los agentes y a la del trabajador de la orujera, el animal fue devuelto a su hogar.
Este caso, ha tenido un final feliz debido a la identificación del animal mediante el correspondiente microchip, es por eso que desde la Jefatura de Policía Local recuerda que es obligación de todo propietario la identificación del animal en la forma que establece la Ley, y advierte que su ausencia supone una infracción grave a la Ley de Protección de los Animales Domésticos.